El agua limpia y accesible para todos es fundamental para conseguir el mundo en el que queremos vivir, y hay suficiente agua dulce en nuestro mundo para conseguirlo. La escasez de agua, su mala calidad y el saneamiento incorrecto afectan de forma negativa a: • La alimentación, haciendo que ésta pueda ser peligrosa. • Los trabajos en los que se necesita agua, pues si el agua es de mala calidad, la gente no puede ganarse la vida con ellos. • La educación de los niños pobres, porque tienen que dedicar su tiempo a ir a por agua. Algunos de los países más pobres en el mundo, ya sufren sequía. La sequía hace que haya más hambre y personas mal alimentadas. Para el año 2050, se calcula que al menos 1 de cada 4 personas vivirá en un país que sufrirá escasez de agua.
Para cumplir el Objetivo 6, los países deben:
- Conseguir el acceso igualitario de todas las personas al agua potable, a un precio que todas puedan pagar.
- Conseguir que todas las personas tengan unos servicios mínimos de saneamiento e higiene; y también que tengan un lugar adecuado donde hacer sus necesidades, para que nadie tenga que hacerlas al aire libre.
- Mejorar la calidad del agua reduciendo la contaminación en las aguas y aumentando el reciclaje y la reutilización de forma segura a nivel mundial. Reciclaje: Manera de convertir los desperdicios en nuevos productos. Reutilización: Volver a utilizar un producto, dándole otro uso.
- Mejorar la utilización del agua, para que todas las personas puedan tener agua para cubrir sus necesidades.
- Reducir el número de personas que sufren escasez de agua.
- Apoyar, enseñar y ayudar a los ciudadanos de los países en desarrollo, a realizar acciones relacionadas con el agua y el saneamiento, como por ejemplo: • El almacenamiento de agua. • La desalinización. • El aprovechamiento de los recursos. • El tratamiento de las aguas sucias. • O las tecnologías de reciclaje y reutilización.